La industria logística avanza rápidamente y ha reescrito por completo los estándares del transporte en carretera. Recientemente, más empresas han comenzado a prestar atención al tipo de vehículo que utilizan para sus entregas y cómo pueden mejorar su eficiencia.
Los vehículos eléctricos o EVs han son una solución limpia y eficaz que revoluciona la industria logística. A medida que los vehículos eléctricos se han vuelto más accesibles, han ido aumentando su impacto en la cadena de suministros.
Hasta ahora, las empresas de logística han utilizado para sus transportes vehículos de combustión interna. Estos vehículos liberan dióxido de carbono a la atmósfera, reducen la calidad del aire y su mantenimiento es costoso. Los vehículos eléctricos han demostrado ser una inversión que merece la pena. Gracias a las ayudas de los gobiernos en los últimos años y diversos factores económicos, el uso de vehículos sostenibles por parte de las empresas ha ido en aumento.
Estos vehículos son versátiles y adecuados para muchos tipos de transporte de cargas y entrega de paquetes. Son realmente efectivos en las entregas de última milla debido a su alta maniobrabilidad y su béquela huella de carbono. También se convierten en un valor añadido significativo al promover ahorros continuos en el uso habitual y el mantenimiento, mejorando también la eficiencia de las rutas. En definitiva, una inversión innovadora y sostenible a largo plazo.
Beneficios del uso de vehículos eléctricos
A medida que el uso de vehículos eléctricos se generaliza, más empresas reconocen sus muchas ventajas para el transporte y la entrega de paquetes.
Económico
En comparación con los vehículos de combustión, los vehículos eléctricos cuentan con unos costes de combustible significativamente más bajos. Con menor gasto de energía por kilómetro, mayor rentabilidad. Los gastos de mantenimiento también son más reducidos debido a sus sistemas mecánicos más simples que requieren poco mantenimiento regular.
Eficiente
Son también increíblemente eficientes en términos de energía, par motor y rendimiento. Los vehículos eléctricos convierten más del 77% de la energía eléctrica de la red en potencia de conducción, frente a los vehículos de gasolina que sólo convierten entre el 12% y el 30%. Además, usan menos energía en el tráfico de las ciudades con paradas y arranques. Al carecer de escape, funcionan de manera más suave y silenciosa, lo que reduce la contaminación acústica.
Amigable con el medio ambiente
Los vehículos eléctricos también tienen beneficios ambientales sustanciales debido a la utilización de energía renovable. Producen cero emisiones, reducen el nivel de dióxido de carbono en el aire y disminuyen la dependencia energética de los combustibles fósiles. Cada año, la huella de carbono de la producción de vehículos eléctricos continúa reduciéndose a medida que los fabricantes priorizan la electricidad de plantas hidroeléctricas, solares o eólicas, que no generan contaminantes al aire.